3 agosto, 2018
Una normativa del Parlamento Europeo prohibirá a partir del próximo uno de septiembre fabricar bombillas halógenas, que serán reemplazadas por lámparas de LED, algo que desconoce el 54 % de los consumidores europeos
Según un estudio llevado a cabo por la empresa de iluminación Ledvance, un 67 % por ciento de los consumidores escucharon algo acerca de la normativa, pero desconocen cuáles son las consecuencias de una medida que empezó progresivamente en el año 2009 para poner fin a las fuentes de luz ineficientes.
El reglamento impide comercializar en Europa este tipo de bombillas fabricadas a partir de esa fecha, aunque permite vender todas aquellas unidades que los establecimientos tengan como excedente.
La normativa impulsa el uso de estas fuentes de iluminación, siguiendo así con la estrategia fijada en el protocolo de Kioto, que en el año 2005 estableció una serie de medidas para paliar las emisiones de gases que producen el efecto invernadero con el objetivo de conseguir una iluminación más eficiente y sostenible
Aparte de la durabilidad, el ahorro energético es una de las principales ventajas de las bombillas LED, ya que consumen un 90 % menos.
«Una lámpara de LED de 8 watios sustituirá a una halógena de 60 watios, y se quedarán unas bombillas que tienen una clasificación energética A y B, desapareciendo aquellas que tengan un clasificación desde la F hasta la C», ha explicado el director comercial de distribución profesional de Ledvance España, Alfonso Canorea.
Este tipo de tecnología ofrece además mejoras en la «calidad de la luz» y en otro tipo de aplicaciones adicionales «como el hecho de que se puedan apagar ellas solas con luz natural o con presencia, o que se puedan apagar con la voz» gracias a los sistemas que hay en el mercado.
Además, las nuevas bombillas LED, equipadas con la última tecnología de filamentos, se pueden utilizar como reemplazos directos de las antiguas bombillas, lo que facilita al usuario final este trabajo de sustitución.
Respecto a proyectos de iluminación en sectores como la hostelería o el tejido empresarial, la secretaria de la junta directiva de la Asociación Profesional de Empresarios de Instalaciones Eléctricas y Telecomunicaciones de Madrid (APIEM), Alicia Perea, considera que hay una gran cantidad de clientes que piden directamente la iluminación LED.
«La iluminación LED corrige además ciertas incomodidades como los deslumbramientos, los reflejos o el calor de las lámparas», ha argumentado Perea.
Respecto al precio de estas bombillas, ha explicado que actualmente «son muy asequibles, por lo que estas inversiones se van a recuperar mucho más rápido», lo que constituye una de las principales preocupaciones por parte de estos clientes.